¿Qué es un CIE?
Se conoce por estas siglas a los Centros de Internamiento de Extranjeros. Se trata de centros públicos, no penitenciarios, que tienen por misión alojar al extranjero cuando se encuentra en situación irregular y va a ser devuelto a su país de origen.
Esta figura está regulada a nivel de la Unión Europea, desde que existe una política migratoria tras el acuerdo de Schengen en 1985.
Según la Ley Orgánica de Extranjería, un extranjero puede ser internado en un CIE por alguno de los siguientes motivos:
-No tener papeles en territorio español (es decir, encontrarse en situación irregular).
-Trabajar sin haber obtenido permiso de trabajo, aun contando con un permiso de residencia válido.
-Estar implicados en actividades contrarias al orden público o a la seguridad interior o exterior del Estado o realizar cualquier tipo de actividades contrarias a los intereses españoles o que puedan perjudicar las relaciones de España con otros países.
-Haber sido condenados, dentro o fuera de España, por delito sancionado con pena privativa de libertad superior a un año. Son los llamados antecedentes penales.
-Incurrir en demora u ocultación dolosas o falsedad grave en la obligación de poner en conocimiento del Ministerio del Interior, las circunstancias relativas a su situación.
-Carecer de medios lícitos de vida, ejercer la mendicidad o desarrollar actividades ilegales.
Sea cual sea el motivo por el que se le haya internado, el extranjero tiene derecho a un abogado. Es importante que este abogado sea especialista en Derecho de extranjería.
En cualquier caso el extranjero también tiene derecho a ser tratado dignamente mientras dure su internamiento, y a que se cumplan el resto de normas reguladas en el Real Decreto 162/2014, de 14 de marzo, por el que se aprueba el reglamento de funcionamiento y régimen interior de los centros de internamiento de extranjeros.
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